Esto no es para cualquiera…
Desde que estoy escribiendo sobre la metodología para Descubrir y Validar Productos, y las fases de experimentos y pruebas rápidas para lograrlo, me he visto hablando con personas y leyendo libros y artículos que están en ámbitos muy distintos.
Eso hizo que me sea muy difícil terminar de saber para quién es esto que estoy publicando.
- ¿Es para gente o compañías de tecnología?
- ¿Es sólo para startups?
- ¿Está limitado a Product Managers? ¿o Desarrolladores? ¿o UX designers?
- ¿Está limitado a productos online?
- ¿Está limitado a e-commerce, SaaS, o productos que impliquen una venta?
La respuesta a todas estas preguntas es no. Esto es mucho más amplio. De hecho, en el libro Sprint los autores (miembros de Google Ventures) dan ejemplos de su experiencia con validación de ideas y productos que van desde compañía de construcción de tuberías hasta medicina, pasando por robótica y cafeterías.
Creo que la respuesta que encontré a “¿para quién es esto?” está fuertemente inspirada en el grupo “Mind the Product”:
“De gente de producto, para gente de producto”
Definitivamente, es para estas “Personas de producto” que hay en todas las industrias y provienen de muchas disciplinas.
¿A qué llamo una “persona de producto?
Ok, eso no ayudo mucho a clarificar. ¿Que es una “Persona de producto”?
Es todo aquél que tenga pasión por productos increíbles y la gente que los crea. ¿Quienes suelen/pueden tener estos perfiles?
- Emprendedores
- Desarrolladores de software
- Gente de UX y Usabilidad
- Product Managers
- Diseñadores de interfaces
- Gente de Marketing
- “Intrapreneurs”
- Gente de Business Intelligence
- Community managers
- y muchos otros…
Puede ser para cualquiera de estos perfiles (y más) siempre que tengan una característica esencial: ese entusiasmo por resolver problemas que tengan grupos de personas a través de productos innovadores.
¿Por qué le sirve a esta gente?
Por qué justamente las técnicas y herramientas que suelo comentar están orientadas a entender esos problemas, generar propuestas de valor atractivas, realizar validaciones y aprendizaje efectivo, para construir un producto ideal.
Todas estas piezas, como la forma de pensar en el usuario y conducir experimentos rápidos, no está relacionado con una disciplina particular. Cualquiera que esté relacionado con la generación de productos la puede aprovechar.
El principal beneficio es encontrar el mejor producto, la mejor propuesta de valor de la forma más rápida y barata posible.
Entonces… ¿es para mi?
Si la descripción de arriba aún no termino de definir si te puede servir o no, trataré de aclararlo en forma de preguntas:
- ¿Participas de alguna forma en la construcción de un producto que resuelve una necesidad de un cliente y querés entender mejor lo que el cliente necesita?
- ¿Es dificil determinar qué incluir y que no en tu producto?
- ¿Hay tantas cosas por hacer que cuesta decidir cuál es más valiosa o cuál hacer primero?
- ¿Querés saber antes de invertir dinero y esfuerzo si tu idea va a funcionar?
- ¿Te frustraste alguna vez por crear algo que nadie usó?
- ¿Es difícil entender en el fondo qué problema resuelve tu idea? ¿Y a quien está apuntada?
Si para alguna de las preguntas de arriba la respuesta es sí, entonces estoy convencido que esta metodología te va a servir.
A quien no le recomendaría este material:
- A aquellos que estén más centrados en lo “económico” que en el usuario
Lo digo sin ninguna connotación negativa, realmente es necesario que haya gente con ese “lente”, cómo los CFOs.
- A personas que den servicios (consultoría, coaching, etc)
Básicamente el concepto de “producto” implica que con una misma solución atacamos a más de una persona. Los servicios 1-1 no se benefician de esta metodología (a menos que estés buscando productizar tu servicio) en cuyo caso, ¡lo recomiendo enfaticamente!
- Si estás convencido que la investigación de mercado es leer los informes de las consultoras prestigiosas
La metodología de descubrimiento de producto plantea un enfoque muy centrado en interactuar directo con usuarios para entender el mercado y sus necesidades. ¡No digo que los informes no sean importantes! Pero no serán la única fuente.
Una última aclaración
En general yo voy a hablar de productos de tecnología. Es un sesgo natural que tengo por la industria que trabajo, lo que me apasiona, la gente con la que hablo más frecuentemente y las historias que suelo escuchar.
Sin embargo, mi intención es seguir ampliando el espectro de ejemplos, con ideas de validación de distintas industrias y para distintos tamaño de empresa o emprendimiento. De hecho, si tenés ejemplos de validación en otras industrias, contactame por que me encantaría hablar con vos 🙂
Me encantaría que escribas en los comentarios si sentís que esto es para vos (o no) y por que. ¿Hay alguna profesión o disciplina que me olvide? ¿Alguien que incluí que no debería?